sábado, 6 de marzo de 2010

De Cómo la Biblia ha Cambiado con el Tiempo

De Cómo la Biblia ha Cambiado con el Tiempo

Autor: Said Abdunur Pedraza


El presente extracto proviene de un libro de divulgación científica, escrito originalmente desde una perspectiva cristiana, que no pretende atacar a la Biblia sino analizar los argumentos de los cristianos fundamentalistas que defienden la doctrina de la infalibilidad bíblica, según la cual, una lectura literal de la Biblia, ajena al lenguaje y al contexto histórico y cultural en que fue escrita, constituye una verdad incuestionable y científicamente exacta.


El primer argumento de correlación entre la Biblia y la ciencia que estoy analizando (El libro de Génesis dice que el hombre fue lo último que Dios creó), a pesar de estar basado en un pasaje Bíblico, se contradice con la propia Biblia. Según el capítulo 1 del Génesis, versículos 1 al 27, Dios creó al hombre al sexto día y fue la última obra de Su creación. Pero según el capítulo 2, versículos 4 al 9, aún no había plantas sobre la Tierra pues Jehová no había creado la lluvia, y fue luego de crear al hombre que plantó el Jardín del Edén, puso allí al hombre, y después creó los árboles. Es decir, la propia Biblia no es clara en decir que el hombre fue la última obra de la creación divina.

De hecho, la inconsistencia entre lo que dice el primer capítulo del Génesis y lo que dice el segundo, hace pensar que se trata de dos historias diferentes provenientes de dos autores distintos. Ya en el siglo XI el astrólogo, poeta y gramático Judío Abraham Ibn Ezra encontró problemas gramaticales y de continuidad que indicaban que la Torá había sido escrita en un amplio periodo de tiempo, por lo que no podía haber sido escrita por Moisés en el monte Sinaí. [1] En 1350, el rabí Judío español Joseph Bonfils, en su comentario a Ibn Ezra, aseguró que el Pentateuco no podía ser autoría única de Moisés, pues incluye nombres de reyes que vivieron mucho después de su muerte, e incluso aseguró que varias secciones de la Torá debían ser autoría de Josué o de algún profeta posterior a él. En el siglo XVII se reconoció que Moisés no era el autor de buena parte del Pentateuco. Y en el siglo XVIII, tres investigadores llegaron de forma independiente a conclusiones idénticas entre sí con respecto a una autoría múltiple, lo que llevó al descubrimiento en el siglo XIX de que hay al menos cuatro fuentes documentales diferentes en el Pentateuco. Hoy día, los eruditos están de acuerdo en afirmar que el Pentateuco no fue escrito por un único autor, sino que se trata de una recopilación de textos de al menos cuatro autores. Por supuesto, hubo una quinta mano que se encargó de realizar la compilación, uniendo los textos, organizándolos y procurando darles cierta unidad, y una sexta, que hizo una compilación previa de de las dos fuentes más antiguas.

Según explica el teólogo evangélico estadounidense Richard Elliot Friedman, [2] se ha denominado texto Yahvista (o fuente J) al datado en el siglo X a.C., en el que se utiliza el tetragrámaton (YHWH), con el que los Judíos escribían originalmente el nombre de Dios. En el alfabeto hebreo antiguo no existían las vocales, y el hebreo actual difiere del antiguo (el hebreo que se habla hoy en Israel fue recreado a partir de estudios del hebreo Bíblico y del rabínico, así como de la lengua ugarítica y del árabe, hechos desde el siglo XIX), y como nadie pronunció ese nombre durante siglos (estaba prohibido hacerlo por respeto), realmente nadie sabe cómo se pronunciaba originalmente. Algunos lo han interpretado como Yahweh (Yahvé), que es como está en la Biblia Dios Habla Hoy y como creen hoy día los eruditos que es la pronunciación más probable (Yahvé es la tercera persona del singular, imperfecto, del verbo havá, que significa “ser”, lo que se relaciona con el versículo “Y respondió Dios a Moisés: —«Yo soy el que soy»”, Éxodo 3:14). Otros lo interpretan como Yehowah (Jehová), que es como aparece en la Biblia Reina-Valera y que es la pronunciación que se utilizaba en el medioevo, hoy considerada errónea por los eruditos bíblicos (laicos y religiosos, protestantes o no) y por la Iglesia Católica Romana. La tradición Judía era decir Señor (Adonai) en lugar de pronunciar el nombre de Dios, por lo que en otras versiones bíblicas, como la Biblia de Las Américas, se utiliza el término Señor en lugar de Yahvé o Jehová. En las versiones en árabe de la Biblia y la Torá se utiliza el nombre de Dios en árabe, Al-Lah, que es como los Judíos y Cristianos de habla árabe, así como los Musulmanes, han llamado siempre al Creador. [3]

Pero también se encuentra el texto Elohísta (o fuente E), como se llama al datado en el siglo IX a.C., en el que se nombra a Dios como Elohim. Estas son las fuentes documentales más antiguas; la fuente J habría sido escrita en el Reino de Judá y la fuente E en el Reino de Israel, es decir, después que el reino que había iniciado y unificado David se dividiera en dos, luego de la muerte de Salomón. Esto se sabe por una serie de diferencias entre los dos textos que son el reflejo de la divergencia entre la forma como se aplicó la Religión mosaica en el reino del sur, dominado por la tribu de Judá, y en el reino del norte, manejado por las demás tribus del pueblo hebreo. Esto nos muestra cómo cada reino utilizó la Torá, modificándola para defender sus propios intereses y establecer supremacía sobre el otro. Las fuentes J y E fueron combinadas por un tercer autor luego de la caída del reino del norte, antes de la aparición de las dos fuentes más recientes, lo que implicó un trabajo de edición muy duro para lograr que dos versiones diferentes de las mismas historias, que hacían referencia a dos dioses distintos, parecieran un texto más o menos unificado. En efecto, por un lado tenemos al dios cuyo nombre era impronunciable, y que terminó siendo reconocido como el único Dios verdadero, y por otro lado tenemos a Él (Elohim), que fue originalmente una divinidad cananea. [4] Muchos eruditos están de acuerdo en que Elohim es el plural de Él; Elohim significaría entonces “dioses”. Hay amplio consenso en aceptar que Elohim y Eloah son derivados de Él. También se asocia Elohim con el verbo árabe “temer”, lo que concuerda con el llamado en las tres religiones abrahámicas a ser temeroso de Dios. Sobre cómo Él, terminó siendo asociado a Yahvé, no hay claridad. Una hipótesis indica que sólo una pequeña parte del antiguo pueblo israelita estuvo en Egipto; esa población, que estuvo también en el Sinaí, adoraba a Yahvé. Cuando llegaron a Israel, se encontraron con las otras tribus israelitas que adoraban a Él. Las diferencias entre las fuentes documentales J y E nos muestran que se mantuvo una diferenciación entre ambos dioses aún en el reino unificado, diferenciación que volvió a hacerse manifiesta durante la división del reino, lo que conllevó a la escritura de dos versiones diferentes de la Torá, una para cada reino. [5] Sólo tras la caída del reino del norte, ambas visiones se mezclaron y unificaron en un solo Dios y en una sola Torá. [6]

Adicionalmente, está el texto sacerdotal (fuente P), que corresponde al dominio de la tribu de Judá luego de la caída del reino del norte (Israel fue conquistado por el imperio asirio en 722 a.C.). Para muchos eruditos Bíblicos, la fuente P fue escrita por el mismo autor del libro de Ezequiel, quien por ello, sería el autor de la mayor parte de los primeros 4 libros de la Biblia. Originalmente, la fuente P fue nada menos que una nueva Torá, reescrita por un sacerdote aarónida para hacerle frente a la Torá compuesta por las fuentes J y E, que favorecía a los sacerdotes levitas descendientes de Moisés. El autor de P no se limitó a rescribir muchas de las historias que habían dejado los autores de J y E, sino que agregó también algunas cosas de su propia pluma, quizá provenientes de otras tradiciones más antiguas. [7] Teniendo en cuenta que la fuente P representa a un Dios sin las cualidades antropomórficas con que lo muestran las fuentes J y E, es perfectamente posible pensar que el autor de P quiso por una parte, recuperar el verdadero monoteísmo original, presente en la Torá auténtica, la más antigua, la que fue realmente revelada a Moisés. Esto concuerda con los descubrimientos antropológicos que han demostrado que el politeísmo es un desarrollo posterior al monoteísmo original, y que en todas las religiones puede rastrearse un único Dios creador mucho antes de la aparición de diversas deidades. [8] Sin embargo, el autor de P introdujo también el concepto de que el creyente es dependiente del clero, haciendo obligatoria la acción de los sacerdotes en todos los aspectos de la vida judía.

Por último, está el texto deuteronómico (fuente D, la más reciente) que corresponde al quinto libro del Pentateuco, agregado a la Torá cuando fue “milagrosamente descubierto” en el templo de Jerusalén por el sacerdote Jilquías en el 622 a.C, unos 6 siglos después de la muerte de Moisés. Casualmente, el contenido del Deuteronomio coincidió con las reformas que estaba imponiendo el gobernante de aquel tiempo, el rey Josías. Hoy día lo llamaríamos una enmienda o reforma constitucional. La fuente D no se encuentra en ningún otro libro de la Torá, pero sí en los seis libros siguientes a ella: Josué, Jueces, 1 y 2 Samuel, 1 y 2 Reyes.

Ahora bien, el libro de Deuteronomio que conocemos hoy día, tampoco corresponde a la versión original “descubierta” durante el reinado de Josías. Según Friedman, dos décadas después de la muerte de Josías, el Deuteronomio era una historia que “parecía irónica, e incluso ridícula”, de modo que resultó necesario revisarla, modificarla y editarla, y según la evidencia, fue el mismo autor del libro de Jeremías quien escribió la versión original y luego la versión corregida. Esto significa que el Pentateuco que conocemos hoy día, está formado por dos Torá (la primera redactada por dos autores distintos, uno favorable al reino de Israel y el otro favorable al reino de Judá, y compuesta por un tercero que fungió como editor), la segunda de las cuales es una respuesta a la primera (un texto de la oposición, por decirlo de alguna forma, que irónicamente terminó siendo combinado con la Torá anterior a la que se oponía), más un libro añadido al final como parte de la reforma emprendida por el rey Josías (libro que luego fue corregido y editado por su propio autor, tras la muerte del rey); y esta combinación de textos fue realizada por una mano adicional (algunos eruditos presumen que fue Esdras el editor final) que también aportó sus propios textos para darle forma final a la Torá como la conocemos hoy día (según los Judíos, el Pentateuco Cristiano tiene, además, algunas alteraciones y errores premeditados, concebidos por los traductores Cristianos para justificar la doctrina del Nuevo Testamento, por lo que el Pentateuco no es exactamente la misma Torá). Con tantos intereses humanos de por medio, no podría decirse que el Pentateuco sea estrictamente revelación divina en un 100% [9]

Particularmente importante resulta el hecho de que la mayor fuente en la Torá actual es la P, la sacerdotal, que elimina la noción de la misericordia de Dios y del poder del arrepentimiento, y establece que es a través de los sacrificios (que sólo pueden ser realizados por los sacerdotes) que se obtiene el perdón por los pecados. Es decir, el autor de la fuente P fue el que estableció la necesidad del clero como intermediario indispensable entre Dios y los hombres, lo que se configura como el abismo más profundo entre Judaísmo e Islam en lo que a práctica religiosa y entendimiento de Dios se refiere. En el Islam no existe el clero, sólo agradando a Dios a través del apego a la ley coránica, llevando una vida recta, se puede acceder a la misericordia de Dios, y no existen intermediarios entre Dios y los seres humanos. [10] A pesar de esta diferencia, la figura no antropomorfizada de Dios que presenta el autor de la fuente P es mucho más cercana a la versión coránica del Creador y a las concepciones más antiguas de Dios que han sido descubiertas por la antropología, [11] que a la que aparece en las fuentes J y E.

Con respecto a las fuentes documentales de la Torá, cuyo descubrimiento es el resultado de 600 años de investigaciones bíblicas, podríamos dividir a los Cristianos en dos facciones tentativas. Los primeros serían los más “laxos”, para quienes el hecho de que el Pentateuco tenga varios autores, correctores y editores a través de los siglos, a más de cambios posteriores sobre el texto de la Torá aceptado por los Judíos, no invalida su mensaje, pues el Pentateuco seguiría siendo fiel a la tradición y habría sido modificado siempre por personas inspiradas por Dios para ello. Esta postura me deja una duda: si los profetas son los elegidos por Dios y enviados por Él para revelar Su mensaje, ¿son también profetas y elegidos de Dios aquellos que, según eso, Él habría enviado para corregir, revisar, ampliar y editar Su revelación? Al parecer, la propia Biblia está en contra de esta suposición: El autor del libro de Jeremías, que ha sido identificado como el mismo autor del Deuteronomio, y por tanto de los seis libros Bíblicos siguientes a él, estaba en contra de la segunda Torá (la fuente P), y aseguraba que quienes la habían escrito eran mentirosos, es decir, habían falseado la ley divina. “¿Cómo decís, «Nosotros somos sabios, y la ley de Jehová está con nosotros»? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas”, Jeremías 8,8. Los eruditos Bíblicos afirman que este autor era un sacerdote leví, y dado que la fuente P era claramente la obra de un sacerdote aarónida, la consideraba un fraude, un ataque al derecho de los levitas musitas de ser los únicos sacerdotes, y por tanto, todo aquel que siguiera esta segunda Torá debía ser castigado con severidad. ¿Entonces, los autores de las fuentes J, E y D modificaron la Torá por inspiración divina y el autor de la fuente P fue un falsario? Recordemos que los primeros 4 libros de la Biblia están conformados principalmente por la fuente P. Como sea, aún cabe la pregunta: ¿Dios se equivoca y debe enviar correctores y editores, o cambia de parecer y debe entonces enviar otros Mensajeros para que alteren el mensaje original?

El segundo grupo de Cristianos serían los más “duros”. Aseguran que todos los eruditos bíblicos, filólogos, historiadores, lingüistas, arqueólogos, teólogos, y en fin, todos los que han cuestionado a lo largo de los siglos que el Pentateuco sea hoy el mismo texto original escrito únicamente por Moisés por revelación divina, están equivocados, y sólo buscan alejar a los creyentes de la verdad. Para ellos, el hecho de que no existan los textos originales de la Biblia, y que los textos que se conocen sean muy posteriores a los originales, no correspondan a sus autores originales y estén escritos en lenguas muertas, y que las diferentes traducciones de la Biblia presenten divergencias importantes en pasajes clave de la misma, no tiene relevancia alguna. Están convencidos que la Biblia es una sola (a pesar que las biblias hebrea, católica y protestante, difieren en número de libros, en número de versículos dentro de los libros, y hasta en el orden y nombre de los mismos) y su mensaje hoy día es el mismo que Dios reveló originalmente a cada uno de Sus Profetas (aseguran que los cambios que pueden verse en las diferentes traducciones e incluso en las diferentes revisiones de una misma traducción, son menores y no alteran el espíritu del mensaje original). Para ellos, no existen contradicciones en el texto bíblico, ni siquiera cuando la fuente P da una explicación sobre por qué debe guardarse el sábado (Éxodo 20:8-11) totalmente distinta a la que da la fuente D (Deuteronomio 5:12-15), o cuando el libro del Éxodo afirma que Dios descansó al séptimo día, mientras Isaías 40:28 afirma que Dios “no desfallece ni se fatiga con cansancio” (para los Musulmanes, es blasfemo decir que Dios se cansa o que tiene emociones humanas). Aseguran que son agentes del demonio enviados para confundir y desinformar, aquellos que ven en la Biblia algo diferente a la perfección del mensaje divino.

Esta es una división arbitraria, obviamente. Entre uno y otro grupo de Cristianos habría que ubicar, por ejemplo, a aquellos que reconocen las variaciones y contradicciones del texto bíblico, los dobletes de sus historias y la imposibilidad de determinar cuál era el mensaje original y cuáles han sido las adiciones y modificaciones al mismo, pero cuya fe no se ve minada por esto, sino que se dedican a investigar con profundidad los orígenes de la Biblia y del Cristianismo, a buscar la figura histórica de Jesús y a tratar de develar cuál fue su verdadero mensaje. A diferencia de los Musulmanes, que confían plenamente en que el Corán es el mensaje inalterado de Dios, fiel palabra por palabra a la Revelación que el ángel Gabriel le entregó al profeta Mujámmad, y que es fundamentalmente la misma que le ha sido entregada a todos los Profetas, estos Cristianos dedican su vida a encontrar la verdadera Revelación divina entre las múltiples ediciones, revisiones y compilaciones que ha tenido la Biblia a través de milenios. Ejemplo de ello es “la hipótesis de Q”, según la cual, los evangelios de Lucas y Mateo fueron escritos con base en dos fuentes documentales distintas: Una fue el evangelio de Marcos, la otra ha sido denominada “Evangelio Perdido Q”. [12] Desde los años 1830 se ha estado buscando este evangelio, y aunque no ha sido encontrado en ninguna excavación arqueológica, la biblioteca de textos Cristianos gnósticos hallada en Nag-Hammadi permitió a los estudiosos modernos tener contacto con un antiguo manuscrito del Evangelio de Tomás, cuya existencia se conocía por la mención que a él hicieron Hipólito y Orígenes en el siglo III d.C. y por el descubrimiento de un fragmento del mismo, en griego, encontrado en papiros a finales del siglo XIX. Gracias a que ahora se cuenta con una versión completa, los investigadores han determinado que este evangelio también se basó en Q, lo que convierte a Q en el documento que más nos acerca al Jesús histórico y a su verdadero mensaje, pues sería el evangelio más antiguo que se conozca, escrito a mediados del siglo primero. [13] Ya que no se ha encontrado en ningún manuscrito, las ediciones de Q que se han publicado hasta ahora parten de investigaciones literarias, históricas y teológicas, siendo el texto actual de Q una reconstrucción hecha a partir del material de los evangelios de Lucas y Mateo que no se encuentra en Marcos. Para algunos estudiosos Musulmanes, Q da evidencia clara de que el mensaje de Jesús fue el mismo que le fue revelado a Mujámmad, y que las enseñanzas de Jesús están más cerca del Islam que del Cristianismo actual.

Volviendo al tema de las dos versiones de la creación en el Génesis, debo mencionar que para los Musulmanes, la Torá fue revelada por Dios a Moisés (tal y como afirman los Judíos), y por lo tanto tenía originalmente una única fuente, un único autor. [14] Que los estudios demuestren que en estos 5 libros hay múltiples fuentes y autores de diferentes épocas con intereses particulares bien definidos, es un argumento en el Islam para reafirmar la idea de que aunque la Torá fue revelada por Dios, los textos que hoy día conocemos de ella no son los originales sino versiones manipuladas por el hombre, por tanto no son confiables y deben ser analizados a la luz del Corán. [15] Desde este punto de vista, si consideramos que, aunque esté apegado a la tradición, el Deuteronomio no forma parte de la Torá original, tendríamos que decir que la Torá de la que habla el Corán corresponde no al Pentateuco, sino a las versiones originales de los libros Génesis, Éxodo, Levítico y Números, que habrían sido revelados por Dios a Moisés y transcritos por sus seguidores más cercanos, tal y como sucedió con la revelación del Corán a Mujámmad. Los Musulmanes también reconocen que el Evangelio fue Revelación de Dios a Jesús, a quien no consideran Hijo de Dios sino uno de los Profetas más importantes del Islam. [16] Sin embargo, investigaciones como la de la “hipótesis de Q” son igualmente prueba para ellos de que el Evangelio original se ha perdido y las versiones actuales, aunque al igual que la Torá aún conservan algunas partes de la revelación original, no son plenamente confiables.

Ahora bien, la multiplicidad de fuentes encontrada en la Torá nos deja en claro que la contradicción acerca de la creación con que arranca el Génesis, es el producto de la contraposición de historias de fuentes diferentes que tenían propósitos opuestos. Sin embargo, los Judíos resolvieron (al menos en parte) esta contradicción hace muchos siglos, a través de un personaje tomado de la mitología babilónica. Según la tradición Judía, el Génesis narra dos historias diferentes de creación, ambas correctas, que sucedieron una tiempo después de la otra. En la primera, Dios creó al hombre y la mujer iguales y a la vez; Adán, el primer hombre, y Lilith, su primera esposa: “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”, Génesis 1:27. Según esta tradición, Lilith al haber sido creada igual al hombre y al mismo tiempo que él, no era una mujer sumisa sino que defendía sus derechos de igualdad frente a Adán, pues ella también era a imagen y semejanza de su creador: “El día en que creó Dios al hombre, a semejanza de Dios lo hizo. Hombre y mujer los creó; y los bendijo, y les puso por nombre Adán el día en que fueron creados”, Génesis 5:1-2. [17] Adán pretendía tener relaciones sexuales poniéndose sobre su esposa, pero Lilith argumentaba que al ser ambos iguales, ninguno debía estar encima del otro, y sólo admitía tener sexo si ambos yacían uno al lado del otro. Lilith, al ver que no compaginaba con Adán y luego de un altercado con él, abandonó el paraíso. Dios decidió entonces buscarle compañía más “apropiada” a Adán, y de una costilla suya le creó a Eva, su segunda esposa y madre de toda la humanidad:
“Después dijo Jehová Dios: «No es bueno que el hombre esté solo: le haré ayuda idónea para él». […] Entonces Jehová Dios hizo caer un sueño profundo sobre Adán y, mientras éste dormía, tomó una de sus costillas y cerró la carne en su lugar. De la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: «¡Ésta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Será llamada ‘mujer’, porque del hombre fue tomada»”, Génesis 2:18 y 21-23.
Eva, al ser creada de forma diferente a como fue creado el hombre, a partir de Adán y después de él, era mujer sumisa, dedicada a cuidar de su esposo y satisfacerlo, y por supuesto, siempre tenía sexo con él en la clásica posición del Misionero, él arriba y ella abajo. (Duda personal: somos simétricos, pero a los hombres no nos sobra una costilla a ninguno de los lados, así que Eva debió ser creada de dos costillas, no de una).

Algunos dicen que Lilith tuvo hijos con Adán, que fueron demonios. Otros dicen que Lilith, fugada del paraíso, se encontró con el ángel caído Lucifer [18] y se hizo su pareja, dando origen a todos los íncubos y súcubos y convirtiéndose ella misma en un demonio femenino, enemigo de los recién nacidos. [19]

La figura de Lilith proviene de la encarnación babilónico-asiria de la lascivia, el demonio Lilitu, que tomaba la forma de bella prostituta. Según la tradición talmúdica, Lilith mataba a los hijos concebidos de forma pecaminosa, y cualquier hombre que durmiera solo podía convertirse en su víctima. Durante el medioevo, Lilith fue representada como la pareja de Satanás e incluso como la serpiente que tentó a Adán y a Eva. Ella encarnaba el lado oscuro de la mujer y a ella eran asociadas las pecadoras, en particular las fornicadoras y adúlteras. Las feministas Judías estadounidenses recuperaron la figura de Lilith en la década de 1970 como símbolo de fuerza e independencia de la mujer. En 1976 se publicó el primer número de la revista Judía feminista “Lilith”. Con la aparición del personaje Lilith en el juego de rol “Vampiro: La Mascarada”, que vio la luz en 1991, y donde se le muestra como la madre de los vampiros cainitas, la figura de Lilith comenzó a extenderse como una especie de mito urbano en la cultura occidental, convirtiéndose en símbolo del feminismo más allá del Judaísmo. [20] Igualmente, los amantes de la literatura de vampiros y los adeptos a la onda gótica que hizo furor en los años 1990, dieron a Lilith la categoría de primera y más poderosa vampira, y de reina de los vampiros, lo que ayudó a extender su mito.

Por supuesto, esta tradición Judía está fuera del texto Bíblico (en ningún lugar de la Biblia aparece el nombre Lilith ni su historia). Algunos asocian la figura de Lilith con la lamia que aparece en compañía de animales de rapiña y carroñeros en el juicio contra Edom, narrado en Isaías 34. Esta mención de la lamia desaparece en traducciones más recientes de la Biblia. Por ejemplo, la Reina-Valera de 1906 dice en Isaías 34:14: “Y las bestias monteses se encontrarán con los gatos cervales, y el peludo gritará á su compañero: la lamia también tendrá allí asiento, y hallará para sí reposo”, pero en la versión de 1995 se lee: “Las fieras del desierto se encontrarán con las hienas, y la cabra salvaje llamará a su compañero; la lechuza también tendrá allí refugio y hallará para sí reposo”, y en la Biblia de las Américas se lee: “Las fieras del desierto se encontrarán con las hienas, el macho cabrío llamará a los de su especie; sí, el monstruo nocturno se establecerá allí, y encontrará para sí lugar de reposo”. Quizás los Cristianos más modernos han querido eliminar de la Biblia las referencias a criaturas míticas que el pueblo hebreo heredó de Babilonia durante su cautiverio allí.

Como sea, la figura de Lilith no existe dentro del Cristianismo [21] ni dentro del Islam. Este último tiene una visión muy diferente de la creación del hombre: En el Corán no aparece la historia de la costilla de Adán, no hay ninguna mención de Eva como la responsable del pecado original, [22] y los humanos no fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios como dice la Biblia. En el Corán, Dios es llamado El Único, pues no tiene igual en toda la creación y nada se le asemeja.

Siguiendo con la idea bíblica de la creación, debido a que la madre de la humanidad fue Eva y no Lilith, los Judíos y Cristianos han creído por siglos que la mujer heredó de Eva una especie de maldición.
“La mujer aprenda en silencio, con toda sujeción. No permito a la mujer enseñar, ni ejercer domino sobre el hombre, sino estar en silencio, pues Adán fue formado primero, después Eva; y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión. Pero se salvará engendrando hijos, si permanece en fe, amor y santificación, con modestia”, 1 Timoteo 2:11-15.
La narración de la creación es muy clara al especificar que Dios castigó a la mujer sometiéndola por completo a la voluntad del hombre cuando los expulsó del paraíso:
“A la mujer dijo: —Multiplicaré en gran manera los dolores en tus embarazos, con dolor darás a luz a los hijos, tu deseo será para tu marido y él se enseñoreará de ti”, Génesis 3:16.
Por ello, aún hoy muchos judíos acatan la recomendación que les hace uno de sus textos doctrinales del siglo II de elevar a diario la siguiente plegaria: “Alabado seas, que no me hiciste pagano. Alabado seas, que no me hiciste mujer. Alabado seas, que no me hiciste inculto”. [23] Pesada cruz la que llevan las mujeres en su espalda. Este dato es de gran importancia si tenemos en cuenta que los creacionistas Cristianos defensores del Diseño Inteligente como ciencia, y defensores de la doctrina de la Infalibilidad de la Biblia, aseguran que todo lo escrito en este libro sagrado es palabra divina y ni una sola frase es contraria a la verdad, y que además, debe ser entendida de forma literal. De manera que las Iglesias Cristianas a las que ellos pertenecen, si realmente siguen al pie de la letra el texto Bíblico, no pueden permitir que una mujer hable en la iglesia, menos que enseñe, y muchísimo menos que se convierta en pastora o sacerdotisa, pues dice el Nuevo Testamento: “Vuestras mujeres callen en las congregaciones, porque no les es permitido hablar, sino que deben estar sujetas, como también la Ley lo dice”, 1 Corintios 14:34. Algunos cristianos afirman que esta visión de la mujer fue cambiada por las enseñanzas de Jesús, pues Él vino a mostrarnos la forma correcta de entender las Escrituras. El problema con este argumento reside en que los textos arriba citados de 1 Timoteo y de 1 Corintios fueron escritos después de la muerte de Jesús por quienes seguían sus enseñanzas. De hecho, ambas son cartas escritas por Pablo de Tarso, considerado apóstol por los Cristianos y santo por los católicos, el hombre que más influencia ha tenido en las doctrinas del Cristianismo en toda la historia (más que el propio Jesús). [24]

La versión coránica de la tentación de Adán y Eva es diferente, allí se le da igual responsabilidad a ambos. 
«Y en cuanto a ti, ¡Oh Adán!, vivid tú y tu mujer en este jardín, y comed de lo que queráis; pero no os acerquéis a este árbol pues seríais malhechores». Pero entonces Satán les susurró a ambos a fin de hacerles conscientes de su desnudez, de la cual no se habían apercibido hasta entonces; y dijo: «Vuestro Sustentador sólo os ha prohibido este árbol no fuera a ser que os volvierais como ángeles, o fuerais a vivir eternamente.» Y les juró: «¡En verdad, soy de los que os desean sinceramente el bien!» —y les sedujo con pensamientos engañosos. Pero tan pronto como hubieron probado ambos el fruto del árbol, se volvieron conscientes de su desnudez; y comenzaron a cubrirse con hojas del jardín. Y su Sustentador les llamó: «¿No os prohibí ese árbol y os dije, ‘En verdad, Satán es enemigo declarado vuestro’?» Respondieron ambos: «¡Oh Sustentador nuestro! ¡Hemos sido injustos con nosotros mismos —y a menos que nos concedas Tu perdón y Te apiades de nosotros, estaremos ciertamente perdidos!»”, Sura 7:19-23.
En el Corán, Adán y Eva fueron tentados y ambos fueron responsables de su error, y su falta fue sólo suya y no heredada a su descendencia, pues Dios los perdonó cuando le mostraron su arrepentimiento:
“Cuando dijimos a los ángeles: «¡Postraos ante Adán!» —se postraron todos, excepto Iblís, que se negó a hacerlo; y entonces dijimos: «¡Oh Adán! En verdad, este es un enemigo tuyo y de tu esposa: no dejéis que os expulse del jardín y te haga desgraciado. Ciertamente, en él no pasarás hambre ni te sentirás desnudo, y no pasarás sed ni sufrirás el ardor del sol.» Pero Satán le susurró, diciendo: «¡Oh Adán! ¿Quieres que te indique el árbol de la vida eterna, y por medio de él un dominio que no se extingue?» Y comieron ambos de él: y entonces se hicieron conscientes de su desnudez y comenzaron a cubrirse con hojas del jardín. Y así desobedeció Adán a su Sustentador, y así cayó en el extravío. Luego, no obstante, su Sustentador lo eligió para Su gracia, aceptó su arrepentimiento, y le concedió Su guía, diciendo: «¡Descended todos de este estado de inocencia, y sed en adelante enemigos unos de otros! Sin embargo, os llegará una guía procedente de Mí: y quien siga Mi guía no se extraviará, ni será desgraciado»”, Sura 20:116-123.

Existen Cristianos y Judíos que obvian la visión Bíblica de la mujer sumisa, esclava del deseo de su marido, y defienden la igualdad de derechos de la mujer. Pero entrados ya en el siglo XXI, vemos cómo en todo el mundo occidental crece la agresión contra la mujer en forma de violencia intrafamiliar del padre contra las hijas y del esposo contra la esposa, [25] de discriminación en el trabajo (cuando un hombre y una mujer ocupan el mismo cargo y se desempeñan con igual eficiencia, la mujer recibe un salario inferior), sobrecarga de responsabilidades (la mujer occidental de hoy debe ser una profesional exitosa, aportar económicamente en el hogar, criar a los hijos, satisfacer al marido, ser amorosa y entregada al hogar, y además mantenerse hermosa dentro de los cánones establecidos por la estética del consumismo), [26] crímenes pasionales (la tasa de mujeres asesinadas por simples sospechas de un hombre celoso crece en todo el mundo occidental), [27] mercantilización y abuso sexual (la mujer occidental es utilizada como objeto sexual y de promoción mercantilista en todas las áreas y a través de todos los medios, y una moral dudosa se ha convertido en el trampolín de éxito para las mujeres en casi todas las profesiones). [28]

Lamentablemente, también una buena parte de hombres Musulmanes obvian las muchas citas coránicas que ponen a la mujer en igualdad de condiciones al hombre, [29] así que la someten y discriminan. Existen Musulmanes que consideran que la mujer no tiene derecho a trabajar y a estudiar, en clara contradicción con la Sunna y el Corán. Dice el Corán:
“En verdad, para todos los hombres y mujeres que se han sometido a Dios, los creyentes y las creyentes, los hombres y mujeres realmente devotos, los hombres y mujeres fieles a su palabra, los hombres y mujeres pacientes en la adversidad, los hombres y mujeres humildes ante Dios, los hombres y mujeres que dan limosna, los abstinentes y las abstinentes, los hombres y mujeres que guardan su castidad, y los hombres y mujeres que recuerdan mucho a Dios: para todos ellos ha preparado Dios perdón de los pecados y una magnífica recompensa”, Sura 33:35-36. También dice: “Y a todo aquel —sea hombre o mujer— que haga buenas obras, y además sea creyente —le haremos vivir una buena vida; y, ciertamente, concederemos a esos su recompensa con arreglo a lo mejor de sus acciones”, Sura 16:97.
En la Biblia y el Talmud, la mujer menstruante es considerada impura, al punto de ser desterrada o recluida durante su período. El Corán no considera que la mujer al menstruar sea impura, sólo le prohíbe tener relaciones sexuales y la declara exenta de hacer oraciones y ayuno mientras dura el período. En el Islam, la palabra de una mujer tiene validez, mientras la mujer Judía no puede testificar hoy día en una corte Rabínica en Israel y la mujer Cristiana es valorada por su belleza física y no por su intelecto. El Corán estipula desde hace más de 14 siglos el derecho de la mujer a tener propiedades, hacer negocios, escoger marido (incluso ser ella la que propone matrimonio), divorciarse, y otros derechos que la mujer judeocristiana apenas ha comenzado a ganar a partir de la segunda mitad del siglo XX. Lo triste es que en varios países islámicos el maltrato del esposo hacia la esposa sigue siendo una práctica común (como lo es en los países iberoamericanos), a pesar de las palabras de Mujámmad registradas en un jadiz que dice: “Los creyentes que son mejores en la fe son aquellos que tienen mejor carácter y los mejores de entre ellos son los que tratan mejor a sus esposas”. [30]

Así que, más que discutir si los libros sagrados son científicamente exactos, habría que discutir si realmente han logrado que los humanos convivamos en paz y que hombres y mujeres nos respetemos y vivamos en amor y armonía. Y ya que la evidencia diaria nos arroja un no rotundo a esta cuestión, tendremos que preguntarnos si esto se debe a que los libros sagrados no son revelación divina, o han sido malinterpretados, o han sido tan alterados que ya no nos son útiles, o si el problema radica en que no los hemos puesto en práctica.

Extracto del libro inédito "LOS TEXTOS SAGRADOS FRENTE A LAS CIENCIAS MODERNAS", por Said Abdunur Pedraza. Otros capítulos de este libro publicados:
"La Biblia y el Corán frente a la pobreza y el hambre"
"Roma: Origen del Derecho Occidental"
"Mito y realidad en torno a Moisés y el Éxodo"

"Sobre la Relación entre Religión y Ciencia"
"Notas sobre el Diluvio Universal y el Arca de Noé" 
"Causa y Efecto según los Fundamentalistas Cristianos"   

----------
NOTAS


[1] “Después que tres de sus hijos murieran y uno se convirtiera al Islam, Ibn Ezra se convirtió en un errante. […] Introdujo el sistema decimal a los judíos que vivían en el mundo cristiano. […] Su trabajo más famoso fue su comentario sobre la Biblia. […] Sus creencias más controvertidas fueron redactadas en un lenguaje muy cuidadoso; los eruditos sospechan que Ibn Ezra no creía que la Torá fue escrita por Moisés en el monte Sinaí. Encontró costuras y problemas gramaticales que indicaban que la Torá fue escrita durante un período de tiempo". Tomado de http://www.jewishvirtuallibrary.org/jsource/biography/IbnEzra.html.

[2] Doctor en teología de la universidad de Harvard, profesor de hebreo y autor de varios libros sobre la Biblia.

[3] La castellanización Alá es incorrecta, pues la primera a es una vocal larga y se pronuncia una l doble como sonido más largo que el de una l única: Al-Lá, o más correctamente Al-Lah, extendiendo suave y levemente el sonido de la última a. Generalmente se encuentra escrito Allah, que es la transliteración inglesa. Etimológicamente, Al-Lah significa “El Dios”, por lo que es incorrecto pensar que los Musulmanes adoran a un dios llamado Al-Lah (eso equivaldría a decir que los ingleses adoran a un dios llamado God). Debido a que en árabe no hay mayúsculas y minúsculas, y que la palabra Al-Lah no tiene femenino, aumentativo, diminutivo ni plural, los araboparlantes (incluso Cristianos y Judíos) y todos los Musulmanes consideran más apropiado llamar a Dios por su nombre en árabe que por su traducción a otros idiomas, máxime al considerar que muchos filólogos relacionan el nombre de Dios en las lenguas romances con el griego Zeus (Dios-Deux-Zeus), y en las lenguas germanas como el inglés y el alemán, con reyes y dioses paganos como Godan (God-Godan) y Odín. El hecho de que la palabra Al-Lah tenga una forma particular y única de escritura, y que no acepte prefijos ni sufijos, es una representación del Dios único, sin igual ni semejante en la creación.

[4] “Tras el descubrimiento de Ugarit (Raš Šamrá) hoy sabemos algo más sobre la divinidad cananea El o Ilu. Era el dios supremo del panteón cananeo, un dios viejo y sabio, bondadoso y misericordioso, «padre de la humanidad» y «creador de todo lo creado». Era un dios que promete descendencia a Kirtu y cumple su promesa. A veces se dice que Ilu es rey. Son algunos de los rasgos indicativos de cómo los cananeos concebían al más excelso de los dioses. Verdad es que el término «El» designa muy frecuentemente a la divinidad en general; pero en la Biblia se ha transmitido como nombre propio […]. El nombre divino EL es semita y pertenece al acervo común de la cultura semita. […] Si comparamos la teología bíblica con la cananea, parece que aquí ha actuado el principio de “identificación”, pero sólo en cierto grado y medida, porque el Dios bíblico EL no es sexuado ni ejerce como tal, no es el progenitor de “los hijos de EL” o “los setenta hijos de Atiratu”, la diosa consorte de EL (la Ašerá bíblica), etc. Como el culto a dios Ilu o EL estaba extendido en el ámbito del antiguo Oriente Próximo, parece más conveniente hablar de “integración” que de “identificación”. Es, pues, verosímil que los patriarcas adorasen al dios EL, conocido en Canaán como el dios entre todos los dioses. El clan tenía una estrecha relación con este dios familiar. Esta divinidad pudo ser el «dios de los padres»”, El Dios de Israel. Ángel Aparicio Rodríguez. Instituto Teológico de Vida Religiosa. 2007. 

[5] “Yahvé no fue el Dios de Israel, de todo el pueblo, desde los orígenes de ese mismo pueblo, sino que llegó a serlo paulatinamente. ¿Cómo y cuándo se convirtió en el Dios del grupo portador de la leyenda tribal? Acaso la respuesta la encontremos en Dt. 32,8-9, que conserva vestigios de un antiguo mito cananeo. Lo cito tal como lo conocemos por Qumran, que documenta la forma más antigua que se conoce: «Cuando Elyon (el Altísimo) asignó a las naciones su heredad, cuando dividió a los hijos de Adán, fijó las fronteras de los pueblos, según el número de los hijos de Dios. La porción de Yahvé fue su pueblo, Jacob el lote de su heredad». Según el contexto del libro del Dt. (TH) es Yahvé quien divide la tierra y la asigna. Elyon es un titulo de Yahvé. Los LXX dan un paso más, y convierten a ‘los hijos de Dios’ —los dioses inferiores del panteón cananeo— en ángeles. Se admite, sin embargo, que en el mito original Elyon es una divinidad cananea: no es Yahvé, sino el dios supremo del panteón cananeo (el dios Ilu o El). Como divinidad suprema, asigna a los dioses inferiores un territorio y un pueblo. A Yahvé, uno de los hijos de El, le tocó Jacob y el territorio que este pueblo ocupa. Según esta antigua tradición Yahvé es uno más entre los dioses e Israel uno más entre los pueblos. Estaríamos en los inicios del yahvismo patriarcal, que, a la larga, fue asumido por el yahvismo exodal. Testigo de esta transición es el profeta Oseas. Este proceso no se llevó a cabo, obviamente, sin tensiones y sin asimilaciones de rasgos, símbolos y lenguaje religiosos propios de la cultura cananea”, Ídem.

[6] La Torá es la Ley Judía. Está conformada por los primeros cinco libros de la Biblia (Génesis, Éxodo, Levítico, Números, Deuteronomio), llamados por los Cristianos Pentateuco. Judíos, Cristianos y Musulmanes aceptan que la Torá fue revelada por Dios a Moisés, pero para los Musulmanes ha sido manipulada y tergiversada a lo largo de los siglos, por lo que la versión actual de la misma ya no es confiable como revelación divina.

[7] “Los investigadores descubrieron que, en la mayor parte de los casos, una de las dos versiones de la historia doblada, se refería a la divinidad citándola por el nombre divino de Yahvé (antiguamente pronunciado Jehová incorrectamente), mientras que la otra versión de la misma historia se refería a la divinidad denominándola simplemente «Dios». […] El análisis crítico sobre la autoría también se ha extendido más allá de los cinco libros de Moisés, alcanzando a cada uno de los libros de la Biblia. El libro de Isaías, por ejemplo, fue adscrito tradicionalmente al profeta Isaías, que vivió en el siglo VIII a.C. La mayor parte de la primera mitad del libro concuerda con esa tradición. Pero los capítulos 40 a 66 del libro de Isaías parecen haber sido escritos por alguien que vivió unos dos siglos después. Hasta el libro de Obadías, que sólo tiene una página, ha demostrado ser una combinación de piezas de dos autores. […] Probablemente, la diferencia más notable entre ambas versiones sea su forma distinta de representar a Dios. No se trata únicamente de que denominen a la divinidad con nombres distintos. J nos presenta una divinidad capaz de lamentar cosas que ha hecho, lo que plantea interesantes cuestiones teológicas, como la de si un ser todopoderoso y sapientísimo lamentaría las acciones del pasado. Nos presenta una divinidad capaz de «indignarse en su corazón», que cierra perfectamente el arca y aspira el aroma del sacrificio de Noé. En P, en cambio, falta prácticamente la cualidad antropomórfica que vemos en J. En P Dios es considerado más bien como un controlador trascendente del universo. […] En JE, Dios comunica personalmente los diez mandamientos en el Sinaí, con una voz que llega de los cielos. En la fuente P no lo hace así. P representa a Yahvé como un ser más cósmico, menos personal que en JE. […] La historia [de la creación] de JE empieza con la Tierra, mientras que la fuente P empieza con los cielos”, ¿Quién Escribió la Biblia? Richard Elliot Friedman. Ediciones Roca S.A. 1992. (http://www.archive.org/stream/WhoWroteTheBible_167/Friedman_Who-Wrote-the-Bible#page/n0/mode/2up).

[8] “Remontándonos tan atrás como podamos estudiando las tradiciones, sean orales o escritas, y analizando las creencias presentes o recientes de aquellos que siguen viviendo unas vidas relativamente primitivas, parece que una fe monoteísta pura precedió al sistema de creencias supersticiosas, degradadas, ineficaces e irrazonables que se aceptó posteriormente. Esto es cierto de la antigüedad clásica, no meramente alrededor del Mediterráneo, sino también en la India y en el Lejano Oriente, e incluso —si es aplicable el término antigüedad— a las grandes civilizaciones del Nuevo Mundo. [...] La historia de la religión sumeria, que fue la influencia cultural más poderosa del mundo antiguo, pudo seguirse mediante inscripciones pictográficas casi hasta los más antiguos conceptos religiosos humanos. Los datos señalan inequívocamente a un monoteísmo original, las inscripciones y los restos literarios de los más antiguos pueblos semitas indican también un monoteísmo primitivo, y ha quedado ahora totalmente desacreditado el pretendido origen totémico de la religión hebrea y de otras religiones semitas”, El Monoteísmo Primitivo y el Origen del Politeísmo. Arthur C. Custance. SEDIN-Servicio Evangélico. 1977. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/02/el-monoteismo-primitivo-y-el-origen-del.html).

[9] Más sobre la hipótesis documentaria en http://es.wikipedia.org/wiki/Hipótesis_documentaria.

[10] Los chiitas sí tienen clero y creen en la infalibilidad de algunos hombres posteriores a Mujámmad, a quienes consideran santos. Estas son dos de las varias razones por las que no son considerados Musulmanes. En el Islam la infalibilidad es única de Dios y hasta Mujámmad cometió errores como ser humano que era. Véase http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/12/el-concepto-chia-del-imanato-explicado.html.

[11] “Lo que Schmidt pudo demostrar de forma concluyente era que si se agrupan las culturas primitivas en base a su nivel cultural y luego se sitúan estos grupos en un orden ascendente, [...] se encuentra al principio una sencilla fe en un Ser Supremo que no tiene ni esposa ni familia. [...] Según Schmidt encontramos esta forma de creencia entre los pigmeos de África Central, a los australianos meridionales, a los habitantes del centro norte de California, a los algonquinos primitivos, y hasta cierto punto a los Koryaks y a los Ainu”, El Monoteísmo Primitivo y el Origen del Politeísmo. Arthur C. Custance. SEDIN-Servicio Evangélico. 1977. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/02/el-monoteismo-primitivo-y-el-origen-del.html).

[12] “El Evangelio Perdido Q, representa el mejor esfuerzo de los estudiosos por recuperar la voz más pura del Jesús del Evangelio. […] La base para la ‘hipótesis de Q’, como es llamado normalmente, es una gran cantidad de material (más de doscientos versos) que se encuentran en Mateo y Lucas pero no en Marcos. La mayoría de los estudiosos no cree que el autor de Mateo ni el de Lucas supieran uno del evangelio del otro. Por consiguiente el material que ellos comparten no puede ser el resultado de que uno copiara del otro, sino debe venir de una fuente escrita más temprana a la que ambos tenían acceso. Esa fuente común era el Evangelio Perdido Q. […] Una advertencia: simplemente porque el Evangelio Perdido Q es relativamente temprano, nosotros no debemos recordarlo como una transcripción cercana de hechos y enseñanzas dadas por el propio Jesús. Q es el producto de una tradición en vías de desarrollo, y algo del material en él es improbable que se remonte a Jesús”, El Evangelio Perdido Q. Compilado por Mark Powelson y Ray Riegert. Edamex, S.A. de C.V. 2000.

[13] “Los versos [...] conocidos como versos Q, son los pasajes que muchos de los estudiosos de la actualidad consideran como la más antigua expresión viva de la tradición oral atribuida a Jesús. […] En Mateo y Lucas aparecen los remanentes de un ‘evangelio oral’ perdido, pero identificable, conocido como Q (del vocablo alemán Quelle, o ‘fuente’). [...] Según los expertos, se trata de un documento antiguo que consistía de instrucciones atribuidas a Jesús, ‘dichos’ que generalmente carecían de material narrativo. [...] Las reconstrucciones modernas de Q constituyen un importante y fascinante material de lectura para cualquier persona interesada en el mensaje de Jesús. [...] Los expertos contemporáneos del Nuevo Testamento creen que algunos versos evangélicos parecen presentar una imagen de Jesús más precisa desde el punto de vista histórico que la que describen otros versos evangélicos. Es decir, que los estudiosos de hoy identifican ciertos pasajes –los pasajes Q– no sólo como instructivos, sino también como de mayor relevancia histórica que otros pasajes. [...] Los estudiosos bíblicos más reconocidos de nuestros tiempos […] consideran a los versos Q de Mateo y Lucas como lo más cerca que llegaremos alguna vez a las enseñanzas del Jesús histórico”, Más Allá de un Mero Cristianismo. Brandon Toropov. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/mas-alla-de-un-mero-cristianismo.html).

[14] “Otra posible explicación en cuanto a la similitud de estilo de J y E, en lugar de suponer que la fuente E se basa en la fuente J, o al contrario, consiste en pensar que ambas fuentes se basaron en una fuente común anterior. Es decir, pudo haber un ciclo tradicional de historias más antiguo sobre los patriarcas, el éxodo, etc., utilizado por ambos autores de las versiones J y E como base de sus respectivas obras. Un ciclo original de esta clase habría sido una colección de historias transmitidas ya fuera por escrito o bien oralmente. En cualquier caso, una vez establecidos los reinos de Israel y de Judá, los dos autores de E y de J adaptaron la colección previamente existente a sus respectivas preocupaciones y propósitos”, ¿Quién Escribió la Biblia? Richard Elliot Friedman. Ediciones Roca S.A. 1992. (http://www.archive.org/stream/WhoWroteTheBible_167/Friedman_Who-Wrote-the-Bible#page/n0/mode/2up).

[15] Debido a que manuscritos del Corán elaborados pocos años después de la muerte de Mujámmad, se conservan en museos y pueden ser leídos por cualquiera que conozca el árabe culto, pues este idioma ha cambiado muy poco, los Musulmanes consideran que es un texto 100% confiable, y que el hecho de que se conserve su mensaje intacto es el milagro que prueba su origen divino.

[16] “Extrayendo a Q de las páginas de los Evangelios tradicionales, los historiadores han descubierto un eslabón perdido entre el Judaísmo y el Cristianismo. En cierto sentido, el Evangelio Perdido Q es precristiano. Fueron escritores posteriores los que agregaron los detalles sobre la vida y muerte de Jesús que se convirtieron en la piedra angular de la creencia Cristiana. El Jesús del Evangelio Perdido Q no es ni Cristo ni el Mesías sino el último en una larga línea de profetas Judíos”, El Evangelio Perdido Q. Compilado por Mark Powelson y Ray Riegert. “A pesar de haber sido retirados de circulación, en forma total y sistemática, todos los libros que hacían alusión a las enseñanzas originales de Jesús para evitar las contradicciones con el nuevo rito, la verdad permaneció grabada de forma indeleble en los ejemplares que aún se conservan de dichos libros. Por ello, y para apuntalar la fe en la nueva doctrina de la Trinidad, se le dio más importancia a las palabras de los jefes de la Iglesia que a las mismas escrituras. […] El alejamiento cada vez mayor de las enseñanzas de Jesús se debió al oscurecimiento de su realidad histórica. La Iglesia logró independizar a la religión no sólo de las Escrituras sino también de Jesús, de este modo Jesús hombre se confundió con un Cristo mitológico. La creencia en Jesús no significa necesariamente creer en el Cristo resucitado. Mientras que los seguidores de Jesús basaban su vida en su ejemplo, la Cristiandad Paulina se basaba en una creencia en Cristo después de su crucifixión, así que las enseñanzas de Jesús durante su vida no tenían importancia”, Jesús, un Profeta del Islam. Muhammad ‘Ataur Rahim. International Islamic Publishing House. 2006. (http://www.islammexico.org.mx/Textos/Jesus_Profeta_de_Islam/Jesus_profeta_de_Islam_prefacio.htm).

[17] Hay otra tradición alternativa a la de Lilith, según la cual, los primeros seres humanos eran andróginos, mitad mujer y mitad hombre unidos por sus espaldas o por sus costados, por ello dice que Dios les puso por nombre Adán, pues Adán era ambos a la vez: “Cuando se trata de exponer el andrógino mosaico, Hebreo desarrolla una interpretación de larga data en la tradición Judía, pues ya la menciona Elaine Pagels en el caso de rabinos de los tiempos Talmúdicos, según la cual el ser humano original era andrógino y luego fue sexuado, separado en dos, tal como Eva fue sacada del cuerpo de Adán”, Andróginos: Eros y Ocultismo en la Literatura Romántica. José Ricardo Chávez. México. 2005. (http://132.248.101.214/html-docs/lit-mex/17-2/ozuna2.pdf). “En la mitología hebrea aparece el Adam Kadmón, hombre prototípico y primordial. […] Para comprender el concepto que describe a ese andrógino, nos vale recordar dos puntos. Primero, el relato de Platón en ‘El Banquete’: «Existió una raza primordial, pues, cuya especie está ahora extinguida, formada por seres que llevaban en sí ambos principios: el Masculino y el Femenino». Los miembros de aquella raza andrógina «eran extraordinarios por su fuerza y atrevimiento» hasta el punto que se enfrentaron a los dioses; son los llamados ‘Gigantes’ en los mitos antiguos, que fueron fulminados. Sin embargo, otra versión que se acerca más a la que se supone por los escritos Midrásicos, fue la que dan por supuesta los textos sagrados. La única manera de ‘neutralizar’ ese poder fue dividiéndolos. […] En el Midrash del Genesis Rabba —método de interpretación de las Escrituras— el Rabbi Yirmeyah ben Lazar dijo: «Cuando el Santo, bendito sea, creó el primer hombre, lo creó andrógino, pues está dicho Macho y Hembra los creó... y les puso de nombre Adam (Gen. 5,2)». Dijo R. Semuel bar Najmán: «Cuando el Santo, bendito sea, creó al primer hombre, lo hizo de dos caras; después lo partió y le proveyó de dos espaldas, una para cada parte». En su ‘Tratado de las Religiones’, Mircea Elíade completa claramente este concepto: «Adán y Eva fueron hechos espalda con espalda, unidos por los hombros, y Dios los separó de un hachazo, cortándolos en dos. Otras interpretaciones difieren, explicando que el primer hombre era Hombre por el lado derecho y Mujer por el lado Izquierdo, pero Dios los partió en dos mitades»”, La Presencia de Lilith en los Escritos Rabínicos y su Origen. María Martha Fernández. Argentina. 2004. (http://www.transoxiana.org/Jornadas/JEO2004/fernandez-lilith.php).

[18] “Lucifer, en la antigüedad, nombre del planeta Venus, en Babilonia llamado Lucero, hijo de la Aurora. En la creencia de que el versículo 12 del capítulo 14 de Isaías, en el Antiguo Testamento, contiene una referencia a la caída en desgracia de Satán, al aludir a la expulsión de los cielos del Lucero de la Aurora (o de la mañana), los padres de la Iglesia comenzaron a identificar a Satán con el término Lucifer”, Microsoft Encarta Premium 2009. Microsoft Corporation. Según el Islam, los ángeles no tienen libre albedrío y son incapaces de contradecir a Dios. Satanás, por tanto, no era un ángel sino un yin, un ser de fuego.

[19] “La primera referencia a la creación de una esposa de Adán anterior a Eva se encuentra en el Midrash Alphabeta de Ben Sira, texto escrito entre los siglos X y IX a.C. Lilith, que mostraba una fuerte impronta cananea, se resistía a yacer por debajo de Adán: «¿Porqué he de yacer debajo de tí? Yo también fui hecha con polvo y por tanto, soy tu igual» —decía, según el Midrash Alphabeta de Ben Sira. Al ser forzada por Adán, pronunció el nombre de Dios, se elevó por los aires y desapareció. Ante las quejas de Adán, Dios envió a Sansenoy, Semangelof y Senoy a buscarla. La hallaron en el Mar Rojo. Esta región se caracterizaba por la presencia de demonios, con los cuales ella ya había engendrado a los Lilim, ‘a razón de más de cien por día’. Se supone que Lilith representaba a las mujeres cananeas, que adoraban a la anteriormente mencionada Anath y acostumbraban mantener relaciones sexuales prematrimoniales. Es una forma de censurar a algunas mujeres israelitas que tenían estas prácticas, y queda expresamente prohibido en Deuteronomio 23,18: «Que no haya prostitución entre las israelitas ni entre los israelitas», en demostración de la pureza sexual. En cuanto a la idea de que la mujer permanezca por sobre el hombre, las adoradoras de la griega Hécate —según lo que reseña Apuleyo— acostumbraban realizar de esta manera sus encuentros sexuales, al igual que lo que indican ciertos grabados del antiguo Sumer. [...] La huida de Lilith al Oriente, y la aparición posterior de Eva, sirven como metáfora moral del comportamiento de la consorte. Eva ya será creada a partir de la costilla de Adán —en una de sus versiones, ya que el término que se utiliza es Tselá, que significa ‘lado’, ‘sombra’ y ‘costilla’—, en una alegoría de la supremacía masculina”, La Presencia de Lilith en los Escritos Rabínicos y su Origen. María Martha Fernández. http://www.transoxiana.org/Jornadas/JEO2004/fernandez-lilith.php).

[20] La autora uruguaya Carmen Posadas escribió el libro “Las Hijas de Lilith”, que se encuentra referenciado en http://www.culturalianet.com/pro/prod.php?codigo=17792.

[21] En el arte Cristiano medieval aparecen algunas imágenes de Lilith, más como representación del pecado encarnado en la mujer que como fruto de una doctrina Cristiana acerca de la primera esposa de Adán.

[22] “En el Corán no hay ninguna mención de Eva como la responsable del pecado original, más bien algunos versículos muestran que es Adán quien sucumbe a las sugestiones de Satán. Por lo tanto, la responsabilidad es compartida por los dos. Después Dios (GA) les perdonó, y el Islam no conoce la enseñanza de la herencia de este pecado como se ve en la lectura de las otras religiones”, La Mujer en la Cultura Arabo-Musulmana. Dra. Asma Lamrabet. 2001. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/la-mujer-en-la-cultura-arabo-musulmana.html).

[23] Historia Bíblica. Lucía Victoria Hernández Cardona, Alberto Ramírez Zuluaga. Universidad de Antioquia. Colombia. 1994.

[24] “Para estar seguros, todos estos pasajes [los versos Q] aparecen en el Nuevo Testamento, y son fáciles de buscar y consultar. Pero si usted alguna vez ha intentado que algún miembro del clero discuta sobre dichos pasajes [...], descubrirá que se da un fenómeno muy particular [...]. San Pablo aparece. Puede que usted comience a hablar de las palabras de Jesús, pero de alguna manera terminará siempre hablando de las palabras de San Pablo. Y esto, en mi opinión, es un engaño. La fe que Jesús predicaba no era el Paulismo, y ningún acto de prestidigitación puede alterar este hecho. No debemos pedir ningún permiso especial para concentrarnos en las auténticas palabras de Jesús, y sólo en las palabras auténticas de Jesús”, Más Allá de un Mero Cristianismo. Brandon Toropov. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/mas-alla-de-un-mero-cristianismo.html).

[25] “En Colombia, según cifras del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en el 2003 se presentaron 8.677 casos de violencia contra la mujer y 2.580 delitos sexuales. Para el año 2005 se reportó en Colombia que el 39% de las mujeres alguna vez unidas, sufrieron agresiones físicas por parte de su compañero; el 85% de las mujeres que alguna vez recibieron violencia física se quejaron de secuelas físicas o psicológicas”, Violencia contra la Mujer. Análisis en el Instituto Materno Infantil de Bogotá, Colombia, 2005. Estudio de Corte Transversal. Sandra Milena López, Pío Iván Gómez Sánchez, Ingrid Arévalo Rodríguez. Revista Colombiana de Obstetricia y Ginecología, Vol. 59, No. 1. 2006. (http://www.scielo.org.co/pdf/rcog/v59n1/v59n1a02.pdf).

[26] “¿Se debe el acortamiento de la lactancia en nuestra sociedad al hecho de que la mujer necesita más tiempo para desarrollar su carrera o para realizarse a sí misma, o al hecho de que son necesarios al menos dos trabajando en una casa para poder pagar la hipoteca? Y me refiero por supuesto, una vez más, no a la élite profesional de nuestra sociedad de consumo, sino a la inmensa mayoría para la que el trabajo no es una fuente de realización personal, sino simplemente una fuente de ingresos económicos”, Problemas de las Mujeres en el Mundo de Hoy. Hayya Iman Travieso. 2008. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/02/problemas-de-las-mujeres-en-el-mundo-de.html).

[27] “Tras el rótulo de ‘crimen pasional’, los asesinatos de mujeres en Argentina son tan cotidianos que se vuelven invisibles. Según el registro de una organización no gubernamental, en 2008 fueron muertas 207 mujeres, casi siempre por sus parejas o ex parejas. Baleadas, apuñaladas, asfixiadas, estranguladas o golpeadas. A veces violadas. Otras, asesinadas junto a sus hijos por la misma violencia machista que goza de amplia tolerancia social y política, denuncian entidades humanitarias y de mujeres. [...] «Lo que queremos demostrar con esta investigación es que no hay estadísticas oficiales y por eso tampoco hay leyes, ni campañas de prevención o erradicación de la violencia de género»”, Crímenes Pasionales Alarman en Argentina: 207 Mujeres Asesinadas en 2008. Marcela Valente. 2009. (http://www.enfoques365.net/N1019-crmenes-pasionales-alarman-en-argentina-207-mujeres-asesinadas-en-2008.html). “No es usual la agresión sexual previa a la muerte de un hombre, pero sí es alarmantemente frecuente en el caso de las víctimas mujeres. [...] Las mujeres corren un alto riesgo de ser revictimizadas cuando acuden a las instancias del Estado a denunciar y corren el riesgo de ser consideradas, incluso, responsables por las agresiones que han sufrido. [...] La situación es bastante generalizada en América Latina”, Feminicidio en Colombia. Estudio de caso en cinco ciudades del país. Elizabeth Castillo. Profamilia. Bogotá, Colombia. 2008. (https://profamilia.org.co/). Más al respecto en https://feminicidio.net/.

[28] “Mire en la televisión. A uno le venden una máquina de escribir con una mujer bella, como si las dos cosas estuvieran relacionadas. Entre menos vestido tenga, venden más. En esta situación lo están engañando. Es muy eficaz, pero es grave. Es manipulación. Eso es engañar, absolutamente. Si se regulara lo que se puede decir en la televisión con respecto al producto. Es que cuántas porquerías no venden... Pero la televisión gana, el que vende las porquerías gana. Los únicos que pierden son las personas que compran”, Leyendo la Economía de Rodolfo Llinás. Extracto de la entrevista realizada por la revista Dinero. Bogotá, Colombia. 2009. (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/leyendo-la-economia-de-rodolfo-llinas.html).

[29] Más sobre la mujer en el Islam en http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/la-liberacion-de-la-mujer-traves-del.html.

[30] La Mujer en el Islam y en el Judeocristianismo: Mito y Realidad. Dr. Sharif Abdul Adim. Traducción del inglés al español por Hashim I. Cabrera. Conveying Islamic Message Society. Egipto. 1995. (http://www.Islamicbulletin.org/).


ARTÍCULOS RELACIONADOS

Los Últimos Hallazgos Arqueológicos Bíblicos y la Autenticidad de la Biblia Actual  (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/04/los-ultimos-hallazgos-arqueologicos.html).

La Biblia y el Corán frente a la pobreza y el hambre (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/la-biblia-y-el-coran-frente-la-pobreza.html).

Mito y realidad en torno a Moisés y el Éxodo (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/02/mito-y-realidad-en-torno-moises-y-el.html).

Sobre la Relación entre Religión y Ciencia (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/04/sobre-la-relacion-entre-religion-y.html).

Roma: Origen del Derecho Occidental (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/01/roma-origen-del-derecho-occidental.html).

El Monoteísmo Primitivo y el Origen del Politeísmo (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/02/el-monoteismo-primitivo-y-el-origen-del.html).

Más allá de un mero Cristianismo (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/11/mas-alla-de-un-mero-cristianismo.html).

Notas sobre el Diluvio Universal y el Arca de Noé (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/06/notas-sobre-el-diluvio-universal-y-el.html).

Causa y Efecto según los Fundamentalistas Cristianos (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/06/causa-y-efecto-segun-los.html).

¿Dónde están los hombres como Elías, David, Josué, Daniel... Mujeres como Débora, Ester, María…? (http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2011/02/donde-estan-los-hombres-como-elias.html).



Share: